Gabriela Mistral, su compromiso con la infancia y cómo la vio a través de los pinceles Sofía Gandarias
El pasado 20 de noviembre fue el Día Internacional del Niño. Queremos seguir celebrando esa fecha con el recuerdo de una de las figuras que más trabajaron por los derechos de la infancia, Gabriela Mistral, y cómo fue retratada a través del pincel de Sofía Gandarias.
Y si hablamos de la infancia, de los niños y de las niñas y de sus derechos, es imposible olvidarse de la figura de la chilena Gabriela Mistral (Vicuña, Chile 1889- Nueva York, Estados Unidos 1957).
Mistral fue una poetisa, diplomática y pedagoga chilena comprometida con la infancia incluso antes de la Declaración de los Derechos del Niño promulgada por la ONU en 1.954. Además, fue la primera mujer latinoamericana en ganar el Premio Nobel de Literatura (1945)
Así, Gabriela Mistral recogía en un texto — ponencia presentada a la Primera Convención Internacional de Maestros, en 1.927 y del que transcribimos parte — aspectos fundamentales de los derechos de los niños y niñas, posteriormente incluídos por la ONU. Referimos esta ponencia teniendo en cuenta el lugar y momento de su redacción, en Chile, en el primer tercio S. XX:
1. «Derecho a la salud plena, al vigor y a la alegría». Lo cual significa derecho a la casa, no solamente salubre, sino hermosa y completa; derecho al vestido y a la alimentación mejores.
La infancia servida abundante y hasta excesivamente por el Estado, debería ser la única forma de lujo —vale decir, de derroche— que una colectividad honesta se diera, para su propia honra y su propio goce. La infancia se merece cualquier privilegio.
2. «Derecho a los oficios y a las profesiones». Pero no en la forma empequeñecida en que se dan en nuestros países los primeros, por maestros inferiores que no han dominado el el lote maravilloso de una artesanía o de un arte mecánica; ni en la forma en la que se abren las profesiones liberales, que están desprestigiándose rápidamente por la falta de selección de los alumnos.
Derecho de la inteligencia, salga ella de la casta que salga, actuar, a dirigir, a gobernar las sociedades. Derecho de la inteligencia a ser defendida, protegida, excitada, confortada y acatada por un estado sagaz y atento que no la abandone ni la desperdicie.
3. «Derecho a lo mejor de la tradición , a la flor de la tradición, que en los pueblos occidentales es, a mi juicio, el cristianismo. «Derecho a la herencia de Jesucristo, de la que ninguna criatura de nuestra raza puede quedar desposeída.
4. «Derecho del niño a la educación maternal», a la madre presente, que no debe serle arrebatada por la fábrica o por la prostitución a causa de la miseria. Derecho a la madre a lo largo de la infancia,a su ímpetu de sacrificio que no ha sido equiparado ni por el celo de la mejor maestra. Cuando la menos, si la madre debe trabajar, derecho a que el niño la tenga a su alcance por medio del trabajo en el hogar.
5. «Derecho a la libertad, derecho que el niño tiene desde antes de nacer a las instituciones libres e igualitarias.» Los adultos que en nuestro países están en este momento alquilando con la riqueza nacional la independencia del territorio, y que a la vez aceptan y afianzan con cada día que pasa los regímenes de tiranía, comprometen, inconsciencia o inconscientemente, la suerte de los niños que vienen, del hijo propio como del ajeno, y van a entregar a la nueva generación una patria disminuida en el espíritu y con su honra menguada delante de los demás pueblos soberanos de sí mismos.
6. «Derecho del niño sudamericano a nacer bajo legislaciones decorosas», que no hagan pesar sobre él durante toda su vida la culpa de sus padres, sino bajo códigos o profundamente cristianos o sencillamente sensatos, como los de Suecia, nOruega y Dinamarca, en que el Estado acepta al hijo de la madre desgraciada como un miembro más del cual espera, al igual que de los otros , cooperación y enriquecimiento. Así recibió Chile ni más ni menos que el don de su independencia de don Bernardo O´Higgins.
7. «Derecho a la enseñanza secundaria y a parte de la superior», en forma semiautodidáctica, la que debe ser facilitada y provocada por el Estado, a fin de que la cultura del obrero y del campesino sean posibles. Con esto podría buscarse en las democracias que están en peligro el que el ciudadano dotado de criterio más rico mejore la calidad de sus representantes, salvando así al sistema de gobierno popular que comienza a envilecerse y a perder consideración en la América.
París, diciembre de 1.927
Ponencia presentada a la Primera Convención Internacional de Maestros, celebrada en Buenos Aires, en enero de 1.928.
Puedes consultar y/o descargar los Derechos del Niño 1927 de Gabriela Mistral, aquí:
Gabriela Mistral a través de los pinceles de Sofía Gandarias
Una mujer tan importante para el desarrollo de la literatura y de los derechos de la infancia no pasó desapercibida para los ojos y el talento de Gandarias, quien la retrató en el año 2010. La obra (óleo sobre lienzo / collage) la puedes encontrar aquí en el Legado Gandarias, dentro de la serie ‘Presencias’. Fue donada a la Biblioteca Nacional de España en noviembre de 2016..